Entrevistado en “Cara y Ceca”, por las Radios de la UNER, el Secretario de Ciencia, Tecnología e Innovación de la UNER, Gabriel Gentiletti, se refirió a la preocupante situación que atraviesan los equipos de investigadores en el país y en la Universidad a causa del desfinanciamiento de diversas líneas de investigación.
Hace pocos días la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (Agencia I+D+i) anunció una serie de medidas que incluyen la anulación de las convocatorias PICT 2022 ya adjudicadas, el cierre definitivo de la convocatoria PICT 2023 y la imposición de una nueva modalidad de convocatoria, que contribuyen al desmantelamiento del sistema de ciencia, tecnología e innovación. Estas medidas interrumpen abruptamente la continuidad de numerosas líneas de investigación y comprometen la subsistencia de equipos consolidados en universidades de todo el país y el futuro de la ciencia nacional.
El Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) expresó su preocupación por estas medidas en un comunicado, y entrevistado en el programa radial “Cara y Ceca” -al aire de las Radios de la UNER- el Secretario de Ciencia, Tecnología e Innovación de la UNER, Gabriel Gentiletti, brindó su opinión sobre el tema.
El bioingeniero explicó, en primer lugar, que para entender el sistema de investigación de cualquier país se necesitan tres pilares fundamentales: “En principio, tener las personas formadas; formar un investigador o una investigadora lleva décadas. Imaginá que tiene que mínimo arrancar de un título de grado, hacer un doctorado (que lleva unos 5 años) y eso recién es la base de un inicio de un investigador que después tiene que ir creciendo en su carrera. Entonces estamos hablando de 15 años normalmente”.
“En segundo lugar, una vez que tenemos ese recurso humano, esos investigadores e investigadoras tienen que estar trabajando en ámbitos de trabajo donde puedan desarrollar su investigación, y tener equipamiento en el caso de las ciencias naturales y exactas”, ejemplificó.
El tercer lugar radica en tener fondos para ir elaborando proyectos, “porque la ciencia se va generando por proyectos en determinadas líneas de investigación, que suelen ser bianuales, trianuales, dependiendo de la situación”.
Al momento de describir el impacto negativo que tiene la anulación de las convocatorias a los Proyectos de Investigación Científica y Tecnológica (PICT), Gentiletti explicó que son procesos donde miles de investigadores formulan proyectos: “El tiempo de formulación lleva normalmente un par de meses; luego pasan a un proceso de evaluación donde otros investigadores los evalúan para determinar y valorar cada uno de ellos y así darles sus calificaciones y después hay un proceso de aprobaciones. El alerta surge porque este tercer pilar es el más importante del país porque es el que tenía la capacidad y el fondeo como para estar alimentando ese proceso de estar sosteniendo la investigación, pagar insumos, movilidad, etc. Todos estos proyectos, convocatorias y ese mecanismo eran la fuente principal de proyectos”.
El documento expresado por el CIN también asegura que ningún país desarrollado del planeta ha abandonado su sistema científico-tecnológico; por el contrario, todos han fomentado su crecimiento como condición indispensable para el progreso económico, social y cultural, y Argentina no puede quedar al margen de esta realidad sin comprometer su futuro seriamente.
“Nosotros en la universidad, por ejemplo, tenemos nuestra propia convocatoria de proyectos, pero cuando comparamos los fondos disponibles que teníamos en una convocatoria y en otra, son muy significativos. Lo nuestro es un estímulo, un apoyo, un sostén de cuestiones muy básicas y los investigadores que buscaban fondo competitivo iban por proyectos como estos que ya no los tienen”, se lamentó Gentiletti.
El Secretario aseguró que este concepto se analiza en un muy corto plazo y sin ningún contexto de la realidad, mencionando que el último Premio Nobel de Economía habla de que los países que tienen desarrollo, con un PBI sostenible y desarrollado, son los que hacen inversiones en innovación, ciencia y tecnología: “Es una terrible mala idea suspender la inversión en ciencia y técnica, y que lo que podamos ahorrar hoy es como no mantener una casa que se te está rompiendo una columna y que después se te va a caer el techo encima”. “Lo importante es tratar de explicarle a la población que esto no es una defensa de que nuestros investigadores se van a quedar sin plata; estamos dejando de invertir en lo que ese grupo de investigadores, profesionales, y nuestros docentes extensionistas utilizan para generar conocimiento, resultados y transferencia a la propia sociedad”, finalizó.
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