En la jornada se compartió la experiencia del Programa Integral A Dos Bandas, desarrollado conjuntamente entre UNER y UDELAR.
La UNER participó del Encuentro Internacional de Cuencas Hidrográficas Transfronterizas por la Paz, organizado por el Comité para el Desarrollo de la Cuenca del Río Uruguay (CCRU) y la Red Euro Latinoamericana para la Gobernanza de Cuencas Transfronterizas. Durante cuatro jornadas, representantes de Argentina, Uruguay, Brasil y países europeos —incluyendo organismos multilaterales, gobiernos locales, universidades y ONG— debatieron sobre cooperación, desarrollo sostenible, paz e integración regional en territorios fronterizos.
En el Encuentro estuvo presente el Secretario de Extensión Universitaria de la Facultad de Bromatología, José Dorati, quien participó de la mesa “El rol de la academia, el turismo y la cultura”, compartiendo la experiencia del Programa Integral A Dos Bandas, desarrollado conjuntamente por la UNER y la Universidad de la República (UDELAR). Allí abordó distintas dimensiones en torno a este programa de extensión y remarcando su significación como una práctica concreta de cooperación académica y de integración territorial, orientada a promover vínculos de conocimiento y solidaridad entre comunidades de ambas orillas del río Uruguay.
Al respecto, Dorati expresó: “El Programa A Dos Bandas constituye una estrategia pedagógica y geopolítica que busca reconstruir la confianza y los lazos entre nuestras comunidades a partir de la cooperación, la producción de conocimiento situado y la educación para la paz. Supone pensar la frontera no como límite, sino como espacio de encuentro y construcción colectiva”.

También destacó la importancia de avanzar en procesos de integración académica en áreas complementarias, facilitar los mecanismos de circulación y cooperación transfronteriza, y ratificó la decisión de la Universidad de contribuir al fortalecimiento del Comité de Cuencas, acompañando la construcción de una agenda común entre los tres países.
El Encuentro concluyó con la Declaración de Salto Grande, en la que las instituciones participantes reafirmaron la paz como valor universal y condición esencial para el desarrollo equitativo de los pueblos, e instaron a profundizar la integración supranacional de las cuencas transfronterizas, promoviendo la participación activa de los gobiernos locales, la sociedad civil y las universidades. El documento también llama a fortalecer los acuerdos de cooperación existentes entre los Estados y a generar mecanismos efectivos para abordar de manera conjunta los desafíos ambientales y sociales del presente, con el propósito de avanzar hacia un futuro común basado en la armonía con el medio ambiente, la cooperación y el bien común.