Estudiantes de cada Facultad presentaron propuestas para solucionar problemas y mejorar la vida universitaria. La votación fue a través del SIU Guaraní y las elegidas recibirán el financiamiento correspondiente. 

El Presupuesto Participativo Estudiantil (PPE) es una iniciativa innovadora que se implementa desde 2023. Hasta principios de septiembre, estudiantes de las 9 unidades académicas, sumada la sede Villaguay, plantearon problemáticas y elaboraron proyectos para resolverlas. Las elecciones fueron el 1 y 2 de octubre, y hoy los proyectos ganadores comenzarán a implementarse. 

Espacios de dispersión y socialización 

Las iniciativas sobre todo plantearon reacondicionar espacios comunes de las facultades para promover el intercambio entre pares y también el estudio. En ese sentido, 

Gabriela Jiménez, integrante del proyecto ganador de la Facultad de Bromatología expresó “buscamos crear un espacio con sillones en la entrada del edificio de las aulas, en donde nos podamos sentar a tomar mates, dialogar y estudiar”. 

Por su parte, Tamara Gamarra y Priscila Benitez, representantes de la Facultad de Ciencias de la Administración, plantearon incorporar más sillas y pintar las mesas ya disponibles en el buffet de la institución. “Nosotros y las futuras generaciones van a disfrutar de momentos únicos que se llevarán de recuerdo de este lugar de la facultad”, manifestaron.  

En la Facultad de Ciencias de la Educación destacaron la necesidad de un espacio para socializar, por lo que se propuso refuncionalizar la plaza seca con la que cuenta el edificio: “Nuestra idea es que deje de ser seca y se llene de vida, que sea una oportunidad para reconstruir lazos que se quebraron en la pandemia”, explicó Anahi Stahringer, integrante de la iniciativa. 

La Facultad de Trabajo Social también repensó sus lugares y planteó adquirir el mobiliario necesario para generar en La Casita un ambiente de estudio, encuentro y que cuente con las comodidades necesarias para quienes son del interior y pasan muchas horas en la institución. Con el proyecto, Milena Gonzalez, refuerza “apostamos a que la UNER siga promoviendo iniciativas como esta, ya que nos permite pensar de qué formas construímos una universidad pública aún más accesible y democrática”.

En la Facultad de Ciencias Económicas se renovarán las sillas del CECEP, una de las salas de estudio, de esta manera se “mejorará la comodidad y permitirá optimizar el uso de los recursos de nuestra facultad”, expresó Rodrigo Ramírez. 

En la Facultad de Ciencias de la Salud (sede Concepción del Uruguay) se direccionó la propuesta al patio interno: “Queríamos contar con un medio para promover la convivencia, como compartir un mate, estudios y charlas. La iniciativa surge por la falta de mesas y sillas en el patio, que es uno de los lugares más concurridos por el estudiantado”, explicó Brisa Ruffa. 

En la Facultad de Ciencias Agronómicas se apostó por ese momento tan esperado de recibirse como profesional, el proyecto #EgresódromoFCA será un espacio específico para la celebración con un cartel y lona para mensajes. “Será un lugar simbólico y emotivo para las fotos, fortaleciendo el sentido de pertenencia. Al establecer reglas claras para el uso del espacio y promover la concientización, aprendemos a valorar y respetar nuestra institución”, manifestó Fernanda Ormaechea. 

Nuevos equipamientos 

Hubo iniciativas que plantearon la adquisición de diferentes tipos de elementos para mejorar la vida universitaria. En la Facultad de Ciencias de la Alimentación se equipará el laboratorio de Mecatrónica con kits electrónicos para utilizar en talleres y materias de la carrera. “Los y las estudiantes tendrán la posibilidad de hacer sus prácticas durante las horas de clase, sin necesidad de recurrir a gastos elevados a través de la compra de estos elementos.También se llevará a cabo un seguimiento de la cantidad de componentes para evitar pérdidas”, profundizaron Sofia Peralta y Maximiliano Bonnin.

Un gol al estrés es el proyecto que resultó ganador en la Facultad de Ingeniería, que busca mejorar la sociabilización y fortalecer el sentido de comunidad. “Esta solución, sencilla pero efectiva, puede ser una herramienta clave para que los y las estudiantes pueden sobrellevar los desafíos de la vida universitaria”, reflexionó Valentín Fonseca, integrante de la propuesta. 

Por su parte, en la Facultad de Ciencias de la Salud sede Villaguay, David Palacios, propuso la adquisición de ventiladores para los espacios de gimnasia y fisioterapia: “Pensé en el bienestar de mis compañeros y docentes, que día a día se encuentran a la par nuestra buscando un mejor confort para dar las clases”.

La escuela secundaria de la UNER también contó con su proyecto, Sin horno, no hay bollo plantea la adquisición de un horno eléctrico para que las y los estudiantes elaboren productos en los espacios curriculares de procesos productivos tanto en el Ciclo Básico Común como en el Ciclo Orientado en Industrias de Procesos. De esta manera, se “fortalecerán los vínculos con sus pares, articulando la teoría con la práctica pedagógica”, explicaron Facundo Gallardo, Santiago Lucero, Ana María Priscila Sánchez, Exequiel Ramón Salinas y Luca Vallejos.

Los proyectos ganadores recibirán el financiamiento necesario para que puedan implementarse en cada institución y así los y las estudiantes comiencen a disfrutar de las iniciativas. Con este tipo de propuestas la Universidad invita a la participación del estudiantado, para que detecten problemáticas y puedan buscar soluciones creativas y compartidas.