La premiación fue en el marco de la World Evaluation Case Competition (WECC), donde participó un equipo de estudiantes de la Maestría en Evaluación de Políticas Públicas de la Facultad de Trabajo Social.
Un equipo de estudiantes de la Maestría en Evaluación de Políticas Públicas de la Facultad de Trabajo Social UNER denominado POLIEVAL resultó premiado como Campeones por América del Sur en la World Evaluation Case Competition (WECC). Durante el evento, desarrollado el 28 de noviembre, equipos de distintos países del mundo respondieron a un desafío de evaluación de un programa. El equipo de estudiantes de la UNER que se consagró campeón, fue seleccionado para representar a la Argentina por primera vez en esta competición.
El grupo estuvo conformado por Sandra Salina, Germán Beber, Mónica Nieva y María Angélica del Estal, quienes contaron con el acompañamiento de la docente de la Maestría Celeste Ghiano. La participación también tuvo el apoyo de la Asociación Civil EvaluAr y de EvalYouth Argentina.
Además del equipo argentino conformado por estudiantes de la Maestría, participaron representantes de Canadá, Chile, Colombia, Ghana, India, Kenia, México, Mongolia, Marruecos, Nepal, Níger, Nigeria, Senegal, Togo, Uganda y Estados Unidos.
El desafío consistió en resolver una propuesta que describiera cómo ayudar a desarrollar la capacidad de evaluación interna de una organización sin fines de lucro que trabaja para refugiados en Armenia. Equipos de estudiantes analizaron un caso en el lapso de ocho horas. Trabajaron juntos en su país de origen, en línea o en forma presencial, y prepararon una presentación para transmitir su comprensión de los temas clave de un caso y sus recomendaciones para la acción.
Las palabras de las y los protagonistas
Germán Beber, Cientista Político y estudiante del posgrado, comentó que “lo más interesante de la competencia es el caso. Tuvimos que generar capacidades internas de evaluación para una ONG que trabaja con refugiados en Armenia. La verdad, fue súper desafiante. Tuvimos que leer sobre el contexto de ese país, la historia, de dónde venía el tema de los refugiados. Para tener una buena base tuvimos que hacer algunas lecturas y un muy buen análisis de la situación. Entender, por ejemplo, por qué los grupos de personas, lo que se denominan las diásporas, migraban, qué les hacía migrar y cuáles eran las implicancias de que eso suceda”.
Beber también destacó el acompañamiento de Celeste Ghiano, a quien denominó “nuestra entrenadora”, docente con una amplísima trayectoria en evaluación de políticas públicas, especialmente desde la perspectiva del sur. “El entrenamiento con ella fue fundamental. Y también lo fue el liderazgo de Mónica Nieva, que nos supo conducir muy bien. Asimismo, el apoyo de la Maestría, que nos motivó muchísimo y cuando le dijimos que queríamos presentarnos nos facilitó todo lo que necesitábamos para poder competir”.
Sandra Salinas, Trabajadora Social y estudiante del posgrado, compartió su experiencia y comentó que la competición fue “un desafío interesante y una instancia de aprendizaje riquísima, teniendo en cuenta que era el único equipo argentino y era la primera vez que Argentina se presentaba en un concurso con estas características. Riquísima no solamente en términos de contenido, sino también en términos de equipo”.
La competencia, comentó Salinas, requirió un proceso de investigación: “Nos pusimos manos a la obra, a estudiar, a investigar, a poder conocer un poco más sobre esta situación de los refugiados y de la organización. Estábamos conectados de modo online porque dos de nuestras compañeras no son de Entre Ríos: una es de Tierra del Fuego y otra de Tucumán. Y eso fue también desafiante para nosotros. Estuvimos conectados ocho horas, tratando de dilucidar la situación de la organización social, una organización no gubernamental que trabaja justamente para las personas refugiadas”.
El objetivo prioritario de este concurso, organizado por evaluadoras y evaluadores independientes, es que haya un crecimiento del interés hacia las profesiones que se dedican a la evaluación, como parte del desarrollo de diferentes proyectos sociales, políticos, económicos. “Entonces, en este sentido, es muy importante poder pensar la evaluación también como una cuestión participativa, una cuestión integral que aporta a los desarrollos de los proyectos que están en la comunidad o a las diferentes organizaciones”, agregó la maestranda.
Fuente: área de Comunicación FTS UNER