Nuestra universidad trabaja en la concientización, desde la necesidad hacia la posibilidad de dejar de fumar, en pos de personas más sanas y ambientes más seguros. 

En el Día Mundial Sin Tabaco, nuestro programa UNER Saludable reitera el compromiso que debemos asumir como comunidad, por espacios libres de humo y por una mejor calidad de vida. Desde la Facultad de Ciencias de la Salud, un equipo de docentes y estudiantes se prepara para llevar este mensaje a otras instituciones, a través del proyecto de extensión Plan iniciador en estrategias para la cesación tabáquica. María Mercedes Pascuccio, su directora, y María Silvina Tabarez, codirectora, dialogaron con UNER Medios acerca de la temática.

El proyecto fue recientemente aprobado y está en su primera etapa, que es la de “formar agentes sanitarios, mayormente docentes y estudiantes de tercer año de Medicina. Posteriormente se van a llevar adelante acciones de consejería breve, que es la primera instancia de la cadena de cese tabáquico”, explicó Pascuccio, quien es médica especialista en Oncología Radiante y docente en la Facultad.

“Con una consejería breve muchas veces se hace un cambio, hay personas que con esa mínima ayuda ya dejan de fumar. También hay tratamientos médicos y multidisciplinarios, existen lugares donde se puede buscar ayuda”, destacó Tabarez, médica especializada en el abordaje integral del tabaquismo y también docente en esa unidad académica. El equipo abocado a esta tarea se completa con 13 estudiantes y 17 docentes que van a trabajar en el CAPS Bajada Grande y el Centro Oncológico ALCEC, ambos ubicados en Concepción del Uruguay.  

El objetivo es llevar información “a una población general, es decir, a pacientes de esas instituciones y sus acompañantes, trabajadores o personas que estén en el lugar circunstancialmente. Se busca poner en el plano de discusión y reflexión la problemática del tabaquismo, y plantear que hay estrategias para el cese tabáquico que se pueden realizar de forma muy sencilla, o de ser necesario, más compleja o especializada”, añadió Pascuccio. 

Cada 31 de mayo, a nivel mundial se busca generar conciencia sobre el terrible impacto del consumo del tabaco. Según la Organización Mundial de la Salud, cada año mueren casi 8 millones de personas en el mundo a causa del tabaquismo, mientras que en Argentina la cifra es de más de 45.000 personas fallecidas anualmente por enfermedades vinculadas. También existen consecuencias negativas a nivel social, ambiental y económico.

La lupa en esta problemática

“A la mayoría de la gente le cuesta dejar de fumar porque estamos hablando de una problemática de adicción. En este caso a la nicotina, que es una de las drogas más adictivas que existen en el mercado. Se necesitan muchos cambios a nivel psicológico, social y conductual, y también cambios biológicos a nivel cerebral que permitan llegar a obtener la cesación tabáquica”, indica Tabarez.

En relación al impacto para el ambiente que rodea al fumador, sostuvo que “no hay niveles seguros libres de humo, ni en el lugar ni entre 100 a 200 metros alrededor de la persona que fuma. El humo del cigarrillo traspasa ventanas, puertas, por eso se busca que tanto dentro de una institución como sus alrededores sean libres de humo. Los ambientes permanecen contaminados por varias semanas y no existe nivel de cambio de aire que permita que tengamos un ambiente limpio; ni con ventiladores, ni abriendo ventanas”, remarcó.

Cuidar la salud individual y comunitaria

“Creo que todos desde distintos puntos, ya sea un familiar, un vecino, los profesionales de la salud, pueden ayudar al fumador a dar el gran cambio hacia la decisión de dejar de fumar”, afirmó la docente codirectora del proyecto.

El humo del cigarrillo traspasa ventanas, puertas, por eso se busca que tanto dentro de una institución como sus alrededores sean libres de humo.

Silvina Tabarez

Por último, reflexionó: “El mensaje para los fumadores que pertenecen a esta Universidad es, primero, el de no fumar en lugares cerrados ni cercanos a la institución, porque respetar los espacios libres de humo es respetar a las otras personas y evitarles el daño. Y segundo, buscar ayuda, ya que muchos quieren dejar pero los maneja esta adicción. Quiero darles el mensaje de que sí se puede, de que hay muchas maneras y muchas formas para lograr la cesación tabáquica”.